Esta novela de Sangu Mandanna nos presenta a Mika Moon, una bruja de 31 años, que ha estado sola casi toda su vida, ya que fue criada por niñeras luego de que sus padres murieran cuando ella era una recién nacida. Su tutora, Primrose, la visitaba de vez en cuando, pero nunca le dio el cariño de una madre, lo que marcó fuertemente a Mika y la llevó a ser una persona que aún no logra encontrar su lugar en el mundo, que realmente no tiene un hogar. A pesar de todo, tiene una personalidad alegre y un poco rebelde, lo que la lleva a crear videos que publica en internet, en donde se hace pasar por bruja (es decir, si bien ella es una bruja de tomo y lomo, crea un personaje para sus videos). Todo cambia el día en que recibe una oferta de trabajo para hacer clases de magia a tres pequeñas brujas. Esto la intriga, porque se supone que las brujas no pueden vivir juntas. Esto porque la magia se podría alborotar y la gente normal podría descubrir lo que realmente son, sin contar con los accidentes mágicos que podrían pasar. Ahora, como Mika estaba sin trabajo y pronta a perder su departamento, decide aceptar la oferta de trabajo.
Es ahí donde aparecen un grupo de personajes muy interesante, especialmente Ian, Ken y Jamie, así como las tres niñas. Desde este punto en adelante la vida le da a Mika la oportunidad de ser parte de una comunidad, de una familia, algo que para ella es nuevo. Claramente, esto no va a ser algo fácil, no solo porque es algo nuevo para ella, sin porque aparecen miedos muy arraigados no solo en Mika, sino que en otros personajes también, que impactan en las diferentes decisiones que deben tomar para enfrentar los problemas que surgen tratando de proteger a las niñas.
Me gustó mucho el personaje de Mika, porque tiene una mirada irónica y divertida de las cosas, equilibrando sus temores y problemas de infancia. Si bien ella tiene temas que resolver, es un personaje querible. Sus conversaciones con Jamie, con respuestas rápidas frente a este personaje malhumorado y sarcástico hacen que el libro sea liviano y entretenido de leer. Otro personaje memorable es Ian, un anciano lleno de energía e ideas locas que es quien movió todos los hilos para que Mika llegara hasta las niñas.
Siempre he sentido debilidad por la historias de brujas y ésta me gustó mucho, pero por sobre todo me gustó porque no solo se queda en el cuento más liviano, sino que toma temas que yo creo relevantes, como la discriminación, la importancia de ser parte de una familia, lo importante de sentirse aceptado tal y como uno es, con lo bueno y lo malo, y los expone con una mirada fresca, pero con profundidad. Al leerlo recordé el libro La Casa en el Mar más Azul de TJ Klune, el cual me encantó.
Realmente recomiendo este libro. Para mí fue un 5/5 estrellas. Uno de los libros que volveré a leer en un tiempo más.
Si quieres conocer más de la autora de este libro, puedes revisar su página web en el link
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