Tercer libro de la trilogía escrita por Carlos Basso que tiene a Código Chile y Código América como las entregas previas. Si no las haz leído, te las recomiendo.
Este libro nos presenta nuevamente a Alberto Prat como el protagonista de este thriller estilo Dan Brown. Prat es un ex agente del Vaticano, que ahora vive una vida tranquila en Nueva York, la que se ve alterada cuando un millonario chileno es secuestrado ¿Cuál es la razón de esto? Conseguir unos documentos antiguos asociados a Isaac Newton y José Miguel Carrera.
Prat se ve envuelto en esta nueva aventura dado que estuvo en contacto con el millonario secuestrado, quien antes de su desaparición le envió un extraño email. Esta relación lo pone en el ojo del huracán y lo obliga a volver a su rol de agente especial del Vaticano para salvar su vida, y por supuesto, resolver este misterio en el camino, lo que lo lleva de regreso a Chile.
La forma en que se relata la historia te lleva al pasado, a la época de la independencia de Chile, donde conocemos a Vicente Benavides y su relación con la búsqueda de un tesoro en la época de Carrera y O’Higgins y vamos entendiendo cómo se originó el misterio actual.
Tal como las dos novelas anteriores, el libro te mantiene preguntándote todo el tiempo ¿Qué pasará ahora? ¿Con qué me van a sorprender? Me mantuvo enganchada todo el tiempo y lo pasé bien leyéndolo. Es bastante dinámico. Si bien no hay una profundización en las motivaciones de los personajes, ya que creo que no es el objetivo que se busca, la forma en que son presentados permite darle continuidad y sustento a la historia. Muy recomendable, aún si no has leído las novelas anteriores.
Mi calificación es de 4/5 estrellas
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